------------------------De La Ciudad Al Campo CC 3 1 Prefacio CC 5 1 Capitulo 1 -- El llamado a dejar las ciudades CC 12 1 Capitulo 2 -- Evitar los conflictos laborales CC 16 1 Capitulo 3 -- Una exhortación a los padres CC 24 1 Capitulo 4 -- Ocupaciones en las zonas rurales CC 28 1 Capitulo 5 -- Preparación para la crisis que provocará la ley dominical CC 30 1 Capitulo 6 -- Las instituciones como centros de colonización CC 34 1 Capitulo 7 -- Guiados por las providencias de Dios CC 40 1 Capitulo 8 -- Nuestras instituciones deben estar lejos de las zonas muy pobladas CC 45 1 Capitulo 9 -- Huida apresurada en el conflicto final ------------------------Prefacio CC 3 1 Los consejos del Espíritu de Profecía insisten repetidamente en los beneficios que ofrece la vida de campo. Las nubes anunciadoras de tormenta señalan cuán apropiada es la repetida exhortación a abandonar las ciudades. Todo adventista consciente se da cuenta de que las aglomeraciones, las tentaciones y los crecientes conflictos laborales que se presentan en la vida de la ciudad no ofrecen un ambiente saludable para las familias cristianas. CC 3 2 A través de los años, millares de adventistas han buscado en los testimonios del Espíritu de Profecía ya publicados los consejos que los orientaron para elegir el ambiente apropiado donde debían establecer su hogar, y para saber cuál debía ser su actitud en su relación con las diversas organizaciones del mundo. Como los presagios de la crisis que se avecina indican cuán sutiles son los peligros y cuán terrible es el conflicto que nos espera, nos ha parecido acertado presentar una nueva edición de estos consejos de manera que atraiga la atención de cada miembro de iglesia. CC 3 3 Y si tomamos en cuenta el tiempo en que vivimos, resulta apropiado no sólo repetir los consejos que ya conocemos porque se han publicado hace mucho tiempo, sino imprimirles el énfasis necesario al acompañarlos con instrucciones más detalladas que se publicaron de vez en cuando en la Review and Herald, o que la pluma inspirada incluyó en cartas personales que dirigió a obreros responsables de la causa de Dios para darles ciertos consejos. Esta edición está en completa armonía con las instrucciones que Elena de White dio a sus fideicomisarios, cuando les indicó que dichos escritos contienen "instrucciones que el Señor me ha dado para su pueblo". La referencia de cada pasaje indica el año en que ha sido escrito o publicado por primera vez. CC 3 4 En este folleto hallaremos fervientes llamados a una acción decidida, al mismo tiempo que una solemne advertencia a no actuar con presunción. Deberíamos prestar atención especial a los consejos que se dan en la Sección VII, "Guiados por las providencias de Dios". La publicación y distribución de esta obra es una respuesta a la firme convicción, expresada por los dirigentes de la iglesia, de que ha llegado el tiempo de reiterar el clamor: "SALGAN DE LAS CIUDADES". Los fideicomisarios de las publicaciones de Elena G. de White ------------------------Capitulo 1 - El llamado a dejar las ciudades Los peligros de las ciudades CC 5 1 "Pocos se dan cuenta de la importancia de rehuir, hasta donde sea posible, todas las compañías que no favorezcan la vida religiosa. Al elegir su ambiente, pocos son los que hacen de la prosperidad espiritual su primera consideración. CC 5 2 "Los padres acuden con sus familias a las ciudades porque se imaginan que allí es más fácil ganarse la vida que en el campo. Los hijos, no teniendo que hacer cuando no están en la escuela, obtienen una educación callejera. De las malas compañías adquieren hábitos de vicio y disipación. Los padres ven todo esto, pero la corrección de su error requeriría un sacrificio, y permanecen donde están, hasta que Satanás obtiene pleno dominio de sus hijos. CC 5 3 "Mejor es sacrificar toda y cualesquier consideración mundanal antes que poner en peligro a las almas preciosas confiadas a su cuidado. Serán asaltados por tentaciones, y se les debe enseñar a enfrentarlas; pero es vuestro deber suprimir toda influencia, romper todo hábito, cortar todo vínculo que les impidan realizar la entrega más libre, abierta y cordial de ustedes mismos y de vuestras familias a Dios. CC 5 4 "En vez de la ciudad atestada, busquen algún lugar apartado, donde vuestros hijos estén, hasta donde se pueda, escudados de la tentación, y allí entreténganlos y edúquenlos para ser útiles. El profeta Ezequiel enumera así las causas que condujeron al pecado y la destrucción de Sodoma: 'Soberbia, saciedad de pan, y abundancia de ociosidad tuvieron ella y sus hijas; y no fortaleció la mano del afligido y del menesteroso' [Eze. 16:49]. Todo los que quieran escapar a la suerte de Sodoma deben rehuir la conducta que trajo los juicios de Dios sobre esa ciudad perversa" (Testimonios para la iglesia, t. 5, pág. 215 [1882]). Vivir en las ciudades no es el plan de Dios CC 6 1 "En el mundo entero las ciudades se vuelven semilleros del vicio. Por doquiera se ve y se oye el mal. En todas partes se encuentran incentivos a la sensualidad y la disipación. La marea de corrupción y crimen sube de continuo. Cada día se registran actos de violencia: robos, asesinatos, suicidios y crímenes inenarrables. CC 6 2 "La vida en las ciudades es falsa y artificial. La intensa pasión por conseguir dinero, el torbellino de excitación y la búsqueda de placeres, y la sed de ostentación, lujo y extravagancia, son otras tantas fuerzas que desvían la mente de los seres humanos del verdadero propósito de la vida. Abren la puerta a una infinidad de males y ejercen sobre la juventud un poder casi irresistible. CC 6 3 "Una de las tentaciones más sutiles y peligrosas que asaltan a los niños y a los jóvenes en las ciudades es el afán de placeres. Muchos son los días de fiesta [feriados]; los juegos y las carreras de caballos arrastran a miles, y el torbellino de las excitaciones y del placer los distraen de los austeros deberes de la vida. El dinero que debiera ahorrarse para mejores fines se desperdicia en diversiones. CC 6 4 "Debido a la actuación de compañías monopolizadoras, y al accionar de los sindicatos y a las huelgas, las condiciones de vida en las ciudades se hacen cada vez más difíciles. Graves disturbios nos aguardan, y muchas familias se verán en la necesidad de abandonar las ciudades. CC 7 1 "El ambiente físico de las ciudades es muchas veces un peligro para la salud. La exposición constante al contagio, el aire viciado, el agua impura, el alimento adulterado, las viviendas oscuras, malsanas y atestadas de seres humanos, son algunos de los muchos males con que se tropieza a cada paso. CC 7 2 "No era el propósito de Dios que los hombres vivieran hacinados en las ciudades, confinados promiscuamente en estrechos alojamientos. Al principio Dios puso a nuestros primeros padres en medio de las bellezas naturales, visuales y de sonido, de las cuales desea que nos deleitemos hoy. Cuanto mejor armonicemos con el plan original de Dios, más fácil nos será asegurar la salud del cuerpo, la mente y el alma" (El ministerio de curación, págs. 281, 282 [1905]). Una actitud indolente CC 7 3 "Esta madrugada no pude dormir después de las dos. Durante la visión de la noche me veía en una junta. Estaba rogando a varias familias que aceptasen las instrucciones establecidas por Dios y saliesen de las ciudades para salvar a sus hijos. Algunas de ellas dejaban pasar el tiempo sin tomar una determinación. CC 7 4 "Los ángeles de la misericordia apresuraron a Lot, a su esposa y a sus hijas tomándolos de las manos. Si Lot se hubiera apresurado tal como el Señor lo deseaba, su esposa no se habría convertido en una estatua de sal. Lot adolecía de un marcado espíritu de dilación. No seamos como él. La misma voz que amonestó a Lot a que saliese de Sodoma nos ruega: 'Salid de en medio de ellos, y apartaos... Y no toquéis lo inmundo' [2 Cor. 6:17]. Quienes obedezcan esta amonestación encontrarán un refugio. Que cada hombre esté bien despierto y procure salvar a su familia. Que se ciñ para realizar el trabajo. Dios revelará punto por punto qué debe hacer después. CC 8 1 "Oigan la voz de Dios hablar a través del apóstol Pablo: 'Ocupaos en vuestra salvación con temor y temblor, porque Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena voluntad' [Fil. 2:12, 13]. Lot recorrió la llanura de mala gana y con lentitud. Se había asociado durante tanto tiempo con la gente impía, que no pudo ver el peligro que corría hasta que su esposa quedó en la llanura convertida para siempre en una estatua de sal" (Mensajes selectos, t. 2, págs. 406,407 [1900]). Las ciudades recibirán los juicios de Dios CC 8 2 "Se acerca el tiempo cuando las grandes ciudades serán visitadas por los juicios de Dios. Antes de mucho, esas ciudades serán sacudidas terriblemente. Cualesquiera que sean las dimensiones y la solidez de los edificios, cualesquiera que sean las precauciones tomadas contra incendios, si Dios toca esas casas, en algunos minutos o algunas horas quedarán reducidas a escombros. CC 8 3 "Las impías ciudades de nuestro mundo serán barridas por la escoba de la destrucción. Mediante las catástrofes que ocasionan actualmente la ruina de grandes edificios y de barrios enteros, Dios nos muestra lo que vendrá sobre toda la Tierra" (Testimonios para la iglesia, t. 7, pág. 83 [1902]). Resultados de desoír las advertencias CC 8 4 "Se me pide que declare el mensaje de que las ciudades llenas de transgresión y pecaminosas en extremo serán destruidas por terremotos, incendios e inundaciones. Todo el mundo será advertido de que existe un Dios que hará notoria su autoridad como Dios. Sus agentes invisibles causarán destrucción, devastación y muerte. Todas las riquezas acumuladas serán como nada... CC 9 1 "Acontecerán calamidades; calamidades de lo más pavorosas, de lo más inesperadas; y estas destrucciones se seguirán la una a la otra. Si se presta atención a las amonestaciones que Dios ha dado, y si las iglesias se arrepienten y regresan a la lealtad, entonces otras ciudades serán perdonadas por un tiempo. Pero si los hombres que han sido engañados continúan en el mismo camino en el cual han estado andando, sin prestar atención a la ley de Dios y presentando falsedades ante el pueblo, Dios les permite sufrir calamidades para que sus sentidos sean despertados... CC 9 2 "El Señor no desechará a los transgresores ni destruirá a naciones enteras repentinamente; sino que castigará a ciudades y lugares donde los hombres se han prestado para ser poseídos por los agentes satánicos. Las ciudades de las naciones serán tratadas con estrictez, y sin embargo no serán visitadas con la extrema indignación de Dios, porque algunas almas renunciarán a los engaños del enemigo, y se arrepentirán y convertirán, mientras que las masas estarán atesorando ira contra sí para el día de la ira" (El evangelismo, págs. 24, 25 [1906]). Los juicios de Dios son inminentes CC 9 3 "Existen razones por las que ni debiéramos edificar en las ciudades. Sobre ellas pronto caerán los juicios de Dios" (Carta 158, 1902). CC 9 4 "Falta poco para que las grandes ciudades sean barridas, de manera que todos deben ser amonestados acerca de la inminencia de estas calamidades" (El evangelismo, pág. 26 [1910]). CC 9 5 "¡Oh, si el pueblo de Dios comprendiera la sentencia de destrucción que pende sobre miles de ciudades, entregadas ahora casi a la idolatría!" (Review and Herald, 10 de septiembre de 1903). La visión de una gran destrucción CC 10 1 "En la mañana del viernes pasado, justamente antes de despertar, se presentó ante mí una escena sumamente impresionante. Me parecía que despertaba del sueño pero en un lugar que no era mi casa. Desde las ventanas contemplaba una terrible conflagración. Grandes bolas de fuego caían sobre las casas, y de ellas salían dardos encendidos que volaban en todas direcciones. Era imposible apagar los incendios que se producían, y muchos lugares estaban siendo destruidos. El terror de la gente era indescriptible" (El evangelismo, págs. 25, 26 [1906]). Dios procura despertar a la gente CC 10 2 "Estando en Loma Linda, California, el 16 de abril de 1 906, pasó delante de mí una escena muy asombrosa. En una visión de la noche yo estaba sobre una altura desde donde podía ver las casas sacudirse como el viento sacude los juncos. Los edificios, grandes y pequeños, se derrumbaban. Los sitios de recreo, teatros, hoteles y palacios suntuosos eran sacudidos y derribados. Muchas vidas eran destruidas, y los lamentos de los heridos y aterrorizados llenaban el aire. CC 10 3 "Los ángeles destructores enviados por Dios estaban obrando. Un simple toque, y los edificios construidos tan sólidamente que los hombres los consideraban como seguros contra todo peligro, rápidamente quedaban reducidos a un montón de escombros. No había seguridad de protección en ningún lugar. Personalmente no me sentía en peligro, pero no puedo describir las escenas terribles que se desarrollaron ante mi vista. Era como si la paciencia de Dios se hubiese agotado y hubiera llegado el día del juicio. CC 11 1 "Entonces el ángel que estaba a mi lado me dijo que muy pocas personas tenían alguna idea de la maldad que reina en el mundo hoy, especialmente de la maldad en las ciudades grandes. Declaró que el Señor ha fijado un tiempo cuando su ira castigará a los transgresores por su persistente menoscabo de su ley. CC 11 2 "Aunque terrible, la escena que pasó ante mis ojos no me hizo tanta impresión como las instrucciones en relación con ella que recibí en esa ocasión. El ángel que estaba a mi lado declaró que la suprema soberanía de Dios y el carácter sagrado de su ley deben ser manifestados a quienes rehúsan obstinadamente obedecer al Rey de reyes. Los que elijan permanecer infieles habrán de ser heridos por los juicios misericordiosos con el fin de que, si fuere posible, puedan despertar y percatarse de la pecaminosidad de su conducta" (Testimonios para la iglesia, t. 9, pág. 76 [1909]). El peligro de permanecer innecesariamente en las ciudades CC 11 3 "En armonía con la luz que me fue dada, insto a la gente a salir de los grandes centros poblados. La malignidad de nuestras ciudades aumenta, y cada vez resulta más evidente que quienes permanezcan innecesariamente en ellas correrán el peligro de perder su alma" (Manuscrito 115, 1907). ------------------------Capitulo 2 - Evitar los conflictos laborales Procurar la libertad que ofrecen las zonas rurales CC 12 1 "Se aproxima rápidamente el tiempo cuando el poder de los sindicatos laborales será muy opresivo. Una y otra vez el Señor ha instruido a los miembros de su pueblo a que saquen sus familias de las ciudades y las lleven al campo, donde puedan cultivar sus propias provisiones, porque en el futuro el problema de comprar y de vender será muy serio. Ahora deberíamos prestar atención a la instrucción que se nos ha dado vez tras vez: 'Salgan de las ciudades y vayan a los distritos rurales, donde las casas no están apiñadas unas al lado de otras, y donde estarán libres de la interferencia de los enemigos'. Evitar las luchas partidarias CC 12 2 "Los hombres se han unido para oponerse al Señor de los ejércitos. Estas confederaciones continuarán hasta que Cristo deje su lugar de intercesión ante el trono de la misericordia y se ponga las vestimentas de la venganza. Los agentes satánicos están en cada ciudad, ocupados en organizar en partidos a aquellos que se oponen a la ley de Dios. Santos profesos e incrédulos declarados toman posiciones en esos partidos. Este no es el momento para que el pueblo de Dios manifieste debilidad. No podemos permitirnos estar desprevenidos ni por un momento" (Mensajes selectos, t. 2, pág. 161 [1904]). Futuros problemas gremiales CC 13 1 "Los sindicatos laborales constituirán una de las agencias que traerán sobre esta Tierra un tiempo de angustia como nunca ha habido desde que el mundo fue creado" (Ibíd., pág. 162 [1903]). Conflictos entre confederaciones laborales y sindicatos de obreros CC 13 2 "La obra del pueblo de Dios consiste en prepararse para los acontecimientos del futuro, los que pronto lo sobrecogerán con fuerza abrumadora. En el mundo se formarán monopolios gigantescos. Los hombres se vincularán en sindicatos que los insertarán en el redil del enemigo. Unos pocos hombres se unirán para apoderarse de todos los medios que puedan obtenerse en ciertas líneas de negocios. Se formarán sindicatos de obreros, y quienes rehúsen unirse a ellos serán hombres marcados" (Ibíd.). Preparación para el acontecimiento CC 13 3 "Los sindicatos laborales y las confederaciones del mundo son una trampa. Hermanos, no participen en ellas y manténganse lejos de ellas. No tengan nada que ver con ellas. A causa de estos sindicatos y confederaciones, pronto será muy difícil para nuestras instituciones llevar a cabo su obra en las ciudades. Mi advertencia es: 'Salgan de las ciudades'. No edifiquen sanatorios en las ciudades. Eduquen a los integrantes de nuestro pueblo para que salgan de las ciudades y vayan al campo, donde pueden obtener porciones pequeñas de tierra y construir un hogar para ellos y sus hijos... CC 13 4 "Nuestros restaurantes deben estar en las ciudades; porque de otro modo los obreros que trabajan en ellos no podrían alcanzar a la gente y enseñarles los principios del recto vivir. Y por ahora tenemos que utilizar salones de reuniones en las ciudades. Pero dentro de no mucho tiempo habrá tal contienda y confusión en las ciudades, que quienes deseen salir de ellas no podrán hacerlo. Debemos estar preparados para estos acontecimientos. Esta es la luz que se me ha dado" (Ibíd., págs. 162, 163 [1903]). Para preservar nuestra individualidad CC 14 1 "Durante años se me ha dado luz especial acerca de que no debemos centralizar nuestra obra en las ciudades. Los disturbios y la confusión que llenan esas ciudades, las condiciones producidas por los sindicatos laborales y las huelgas, constituirán un gran estorbo para nuestra obra. Los hombres están buscando poner bajo la esclavitud de ciertos sindicatos a los que trabajan en diferentes oficios. Esto no es el plan de Dios, sino que es el plan de un poder que no deberíamos reconocer de ningún modo. La Palabra de Dios se está cumpliendo. Los impíos se están uniendo en atados listos para ser quemados. CC 14 2 "Debemos utilizar ahora todas las facultades que se nos han confiado para dar el último mensaje de amonestación al mundo. En esta obra debemos preservar nuestra individualidad. No hemos de unirnos a sociedades secretas ni a sindicatos laborales. Debemos permanecer libres en Dios, y volvernos constantemente a Cristo en busca de instrucción. Debemos realizar todos nuestros movimientos con la comprensión de la importancia de la obra que debe cumplirse para Dios" (Ibíd., pág. 163 [1902]). Desprecio del Decálogo CC 14 3 "Estos sindicatos constituyen una de las señales de los últimos días. Los hombres están siendo unidos en atados listos para ser quemados. Puede ser que sean miembros de iglesia, pero mientras pertenezcan a esos sindicatos no pueden guardar los mandamientos de Dios; porque el pertenecer a esos sindicatos significa despreciar todo el Decálogo. CC 15 1 " 'Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con todas tus fuerzas, y con toda tu mente; y a tu prójimo como a ti mismo' [Luc. 10:27]. Estas palabras resumen todo el deber del hombre. Implican la consagración de todo el ser cuerpo, alma y espíritu al servicio de Dios. ¿Cómo pueden los hombres obedecer estas palabras, y al mismo tiempo prometer apoyar aquello que priva a su prójimo de la libertad de acción? ¿Y cómo pueden los hombres obedecer estas palabras, y formar agrupaciones que les roben a las clases más pobres las ventajas que les pertenecen con justicia, impidiéndoles comprar o vender, a no ser bajo ciertas condiciones?" (Ibíd., págs. 163, 164 [1903]). Sindicatos que se han formado o que se formarán CC 15 2 "Quienes pretenden ser hijos de Dios no debieran unirse en ningún caso a los sindicatos laborales que están formados o que se formarán. El Señor lo prohíbe. Quienes estudian las profecías, ¿no pueden ver lo que está delante de nosotros?" (Ibíd., pág. 164 [1902]). ------------------------Capitulo 3 - Una exhortación a los padres Alejar a los hijos de los centros de iniquidad CC 16 1 "Que los padres no se dejen tentar por ninguna ventaja temporal que los induzca a descuidar la educación de sus hijos. Siempre que sea posible, los padres tienen el deber de establecer su hogar en el campo en bien de sus hijos. Hay que proteger cuidadosamente tanto a los niños como a los jóvenes. Debería mantenérselos alejados de los centros de iniquidad que hay en nuestras ciudades. Permitamos que los rodee la influencia de un verdadero hogar cristiano: un hogar donde mora Cristo" (Carta 268, 1906). Antes que sobrevenga el azote CC 16 2 "Antes que el azote llegue como inundación de aguas sobre los habitantes de la Tierra, el Señor exhorta a todos quienes son israelitas espirituales de verdad a prepararse para ese evento. A los padres les hace llegar este grito de alarma: 'Junten a sus hijos en sus hogares; sepárenlos de aquellos que desprecian los mandamientos de Dios, que enseñan y practican lo malo. Salgan de las grandes ciudades tan pronto como les sea posible. Establezcan escuelas de iglesia. Den a sus hijos la Palabra de Dios por fundamento de toda su educación' " (Testimonios para la iglesia, t. 6, pág. 199 [1900]). CC 16 3 "El Señor me instruyó para que advierta a nuestro pueblo que no se congregue en las ciudades para habitar en ellas con sus familias. Se me indicó que diga a los padres y a las madres: 'Cuiden de mantener a sus hijos dentro de los límites de vuestro hogar' " (Manuscrito 81, 1900). El alma de los hijos versus la comodidad y conveniencia CC 17 1 "Los niños no deben estar expuestos por más tiempo a las tentaciones de las ciudades que están maduras para su destrucción. El Señor nos ha amonestado y aconsejado para que saliésemos de las ciudades. Por eso no debemos hacer más inversiones en ellas. Padres y madres, ¿cómo consideran el alma de sus hijos? ¿Están preparando a los miembros de sus familias para ser trasladados a las cortes celestiales? ¿Los están preparando para que sean miembros de la familia real e hijos del Rey celestial? 'Porque ¿qué aprovechará al hombre si ganare todo el mundo, y perdiere su alma?' [Mar. 8:36]. ¿Qué importancia tienen el ocio, la comodidad y la conveniencia, comparados con el valor del alma de vuestros hijos?" (Mensajes selectosy t. 2, pág. 407 [1905]). Las cualidades cristianas se desarrollan mejor en los lugares apartados CC 17 2 "Ni una familia en cien se beneficiará en los aspectos físico, mental o espiritual por residir en la ciudad. Es mucho más fácil obtener fe, esperanza, amor y felicidad en los lugares apartados, en medio de los campos, las montañas y los árboles. Alejen a sus hijos de las escenas y los sonidos de la ciudad, del bullicio y el estrépito de los tranvías y los carros, y su mente se fortalecerá. Descubrirán que es más fácil que la verdad de la Palabra de Dios halle morada en sus corazones" (Manuscrito 76, 1905). CC 18 3 "Envíen a los niños a las escuelas ubicadas en la ciudad, donde cada faceta de la tentación está aguardando para atraerlos y desmoralizarlos, y la tarea de edificar su carácter será diez veces más difícil tanto para los padres como para los hijos" (Fundamentals of Christian Education, pág. 326 [1894]). El campo es un lugar de refugio CC 18 1 "Los padres deben comprender que la educación de sus hijos es una obra importante en la salvación de las almas. El campo ofrece oportunidad para una abundante ejercitación en la práctica de hacer lo que debe ser hecho, el cual proporcionará salud física mediante el desarrollo de los nervios y los músculos. Mi mensaje para la educación de nuestros hijos es: 'Fuera de las ciudades'. CC 18 2 "Dios proporcionó a nuestros primeros padres los medios para llevar a cabo una verdadera educación cuando los instruyó para que labrasen la tierra y cuidasen el huerto que constituía su hogar. Después de la entrada del pecado, debido a la desobediencia de los requerimientos del Señor, se acrecentó enormemente el trabajo de cultivar el terreno, porque la tierra, a causa de la maldición, produjo espinas y cardos. Pero el trabajo en sí mismo no se dio a causa del pecado. El gran Maestro mismo bendijo el trabajo de cultivar el suelo. Como en los días de Noé CC 18 3 "Satanás tiene el propósito de atraer a las ciudades a los hombres y a las mujeres, y con el fin de lograrlo inventa toda clase de novedades y diversiones, y toda clase de cosas excitantes. Y las ciudades de la Tierra están llegando a ser hoy como las ciudades que existían antes del diluvio..." (Mensajes selectos, t. 2, págs. 407, 408 [1908]). CC 18 4 "Deberíamos sentir una preocupación constante al observar el cumplimiento de las palabras de Cristo: 'Mas como en los días de Noé, así será la venida del Hijo del Hombre' (Mat. 24:37). En los días que precedieron al diluvio se inventaban todo tipo de diversiones para conducir a hombres y a mujeres al descuido y al pecado. Hoy, en 1 908, Satanás está obrando intensamente para que prevalezcan las mismas condiciones de maldad. Y la Tierra se está corrompiendo. Los profesos cristianos respetarán muy poco la libertad religiosa, porque muchos de ellos no tienen ninguna comprensión de las cosas espirituales. CC 19 1 "No podemos dejar de ver que el fin del mundo se acerca. Satanás está obrando en la mente de hombres y mujeres, y muchos parecen sentirse invadidos por el deseo de diversión y excitación. Como en los días de Noé, está aumentando la maldad en todas sus formas. El divorcio y el matrimonio están a la orden del día. En un tiempo como el presente, quienes procuran guardar los mandamientos de Dios deberían buscar lugares apartados, lejos de las ciudades..." (Manuscrito 85, 1908). No es una gran privación CC 19 2 "¿Quién será advertido? Volvemos a decir: 'Salgan de las ciudades'. No consideren que es una gran privación el tener que trasladarse a los cerros y las montañas, sino busquen un retiro donde puedan estar a solas con Dios, para aprender su voluntad y sus caminos... CC 19 3 "Insto a nuestro pueblo a que convierta la búsqueda de la espiritualidad en la obra de su vida. Cristo está a la puerta. Por esto digo a nuestro pueblo: 'No consideren que es una privación el ser llamados a dejar las ciudades para trasladarse al campo. Allí esperan abundantes bendiciones para quienes deseen aprehenderlas. Al contemplar las escenas de la naturaleza, las obras del Creador, y al estudiar la obra de la mano de Dios, serán transformados imperceptiblemente a la misma imagen' " (Mensajes selectos, t. 2, pág. 408 [1908]). Cómo obtener los mejores resultados de la vida CC 20 1 "La vivienda costosa, el mobiliario primoroso, el ornamento, el lujo y la holgura no suministran las condiciones indispensables para una vida feliz y provechosa. Jesús vino a esta Tierra para realizar la obra más importante que haya sido jamás efectuada entre los hombres. Vino como embajador de Dios para mostrarnos cómo vivir para obtener los mejores resultados de la vida. ¿Cuáles fueron las condiciones escogidas por el Padre infinito para su Hijo? Un hogar apartado en los collados de Galilea; una familia sostenida por medio del trabajo honrado y digno; una vida sencilla; la lucha diaria contra las dificultades y penurias; la abnegación, la economía y el servicio paciente y alegre; las horas de estudio junto a su madre, con el rollo abierto de las Escrituras; la quietud de la aurora o del crepúsculo en el verdeante valle; las santas actividades de la naturaleza; el estudio de la creación y la providencia; y la comunión del alma con Dios: tales fueron las condiciones y las oportunidades que hubo en los primeros años de la vida terrenal de Jesús" (El ministerio de curación, págs. 282, 283 [1905]). La influencia del campo en la vida de los hombres nobles CC 20 2 "Tal fue el caso también para la gran mayoría de los mejores y más nobles hombres de todas las edades. Lean la historia de Abraham, Jacob y José, de Moisés, David y Eliseo. Estudien la vida de los hombres que en tiempos posteriores desempeñaron cargos de confianza y responsabilidad, de los hombres cuya influencia fue de las más eficaces para la regeneración del mundo. CC 20 3 "¡Cuántos de esos hombres se criaron en humildes hogares del campo! Poco supieron de lujos. No malgastaron su juventud en diversiones. Muchos de ellos tuvieron que luchar contra la pobreza y las dificultades. Desde muy jóvenes aprendieron a trabajar, y su vida activa al aire libre dio vigor y elasticidad a todas sus facultades. Obligados a depender de sus propios recursos, aprendieron a combatir las dificultades y vencer los obstáculos, con lo cual adquirieron coraje y perseverancia. Aprendieron a tener confianza en sí mismos y dominio propio. Apartados en gran medida de las malas compañías, se contentaban con placeres naturales y buenas compañías. Eran sencillos en sus gustos y temperantes en sus hábitos. Se dejaban dirigir por principios, y crecían puros, fuertes y veraces. Al ser llamados a efectuar la obra principal de su vida, pusieron en juego poder físico y mental, buen ánimo, capacidad para idear y ejecutar planes, y firmeza para resistir al mal, lo que hizo de ellos verdaderas potencias para el bien en el mundo" (lbíd., págs. 283, 284 [1905]). Mejor que las riquezas CC 21 1 "Mejor que cualquier herencia de riquezas que puedan dejar a sus hijos será la dádiva de un cuerpo vigoroso, una mente sana y un carácter noble. Quienes entiendan lo que constituye el verdadero éxito de la vida serán sabios a tiempo. Al establecer un hogar recordarán las mejores cosas de la vida. CC 21 2 "En vez de vivir donde sólo pueden verse las obras de los hombres, y donde lo que se ve y se oye sugiere a menudo malos pensamientos, donde el alboroto y la confusión producen cansancio e inquietud, vayan a vivir donde puedan contemplar las obras de Dios. Hallen la paz del espíritu en la belleza, quietud y paz de la naturaleza. Descanse vuestra vista en los campos verdes, las arboledas y las colinas. Miren hacia arriba, al cielo azul que el polvo y el humo de las ciudades no oscureció, y respiren el aire vigorizador de ese cielo. Vayan a donde, lejos de las distracciones y disipaciones de la vida de la ciudad, puedan dar vuestro compañerismo a vuestros hijos y enseñarles a conocer a Dios a través de sus obras, y así prepararlos para una vida de integridad y utilidad (Ibíd., pág. 284 [1905]). Múltiples beneficios de una vida activa al aire libre CC 22 1 "Sería bueno para ustedes que dejaran a un lado sus preocupaciones y encontraran refugio en el campo, donde las influencias que corrompen la moral de la juventud no son tan fuertes. CC 22 2 "Es verdad, en el campo no estarán totalmente libres de dificultades ni preocupaciones; pero podrán evitar muchos males y cerrar la puerta a un diluvio de tentaciones que amenazan dominar la mente de sus hijos. Ellos necesitan estar ocupados en diversas actividades. La monotonía de sus hogares los pone inquietos y revoltosos, y han caído en el hábito de juntarse con los muchachos viciosos de la ciudad, recibiendo de este modo una educación callejera... CC 22 3 "Para ellos sería muy provechoso vivir en el campo; una vida activa y al aire libre les daría salud física y mental. Tendrían una huerta para cultivar, donde podrían encontrar distracción y ocupación útil. El cultivo de plantas y flores ayuda a mejorar el gusto y el juicio, al mismo tiempo que el contacto con las cosas útiles y hermosas que Dios ha creado ejerce una influencia que refina y ennoblece la mente y la dirige hacia el Hacedor y Maestro de todo" (Testimonios para la iglesia, t. 4, págs. 137, 138 [1876]). No esperen que un milagro deshaga los resultados de una conducta impropia CC 22 4 "Miro estas flores y, cada vez que las veo, pienso en el Edén. Constituyen una expresión del amor de Dios hacia nosotros. Así es como él nos proporciona en este mundo un goce anticipado del Edén. Quiere que nos deleitemos en las cosas hermosas de su creación, y que veamos en ellas una expresión de lo que él hará por nosotros. CC 23 1 "Desea que vivamos con amplitud de espacio. Su pueblo no debe aglomerarse en las ciudades. Él quiere que sus hijos lleven a sus familias fuera de las ciudades con el fin de prepararlas mejor para la vida eterna. En un poco de tiempo más tendrán que abandonar las ciudades. CC 23 2 "Estas ciudades están llenas de toda clase de impiedades: huelgas, asesinatos y suicidios. Satanás está en ellas y domina a los hombres en su obra destructiva. Bajo su influencia matan por el placer de matar, y harán esto cada vez más... CC 23 3 "Si nos colocamos bajo influencias objetables, ¿podemos esperar que Dios realice un milagro para deshacer los resultados de una conducta impropia? Por cierto que no. Salgan de I as ciudades tan pronto como sea posible, y adquieran una porción de tierra donde puedan tener una huerta, donde vuestros hijos puedan ver crecer las flores y aprender de ellas lecciones de sencillez y pureza" (Mensajes selectos, t. 2, págs. 408, 409 [1903]). ------------------------Capitulo 4 - Ocupaciones en las zonas rurales La tierra suplirá nuestras necesidades CC 24 1 "Si se cultiva la tierra, ella proveerá, con la bendición de Dios, para nuestras necesidades. No tenemos que desanimarnos en cuanto a las cosas temporales en virtud de fracasos aparentes, ni debiéramos descorazonarnos a causa de las demoras. Debiéramos trabajar el suelo en forma alegre, esperanzada y agradecidamente; creyendo que la tierra encierra en su seno ricas provisiones para el obrero fiel, provisiones más preciosas que el oro o la plata. La mezquindad que se le atribuye es un testimonio falso. Mediante un cultivo adecuado e inteligente, la tierra entregará sus tesoros para beneficio de la humanidad. Las montañas y las colinas están cambiando; la tierra se está envejeciendo como ropa de vestir; pero la bendición del Dios, que preparó una mesa para su pueblo en el desierto, no cesará jamás. CC 24 2 "Nos esperan tiempos solemnes, y existe gran necesidad de que las familias salgan de las ciudades y se internen en el campo, con el fin de que la verdad pueda llevarse a los vallados asi como a los caminos de la Tierra. Mucho depende de que se tracen nuestros planes de acuerdo con la Palabra del Señor y se lleven a término con perseverante energía. El éxito depende más de la consagrada actividad y perseverancia que del genio y el estudio de los libros. Todos los talentos y las aptitudes otorgadas a los agentes humanos, si no se usan, son de escaso valor. CC 24 3 "Un retorno a los métodos más sencillos será apreciado por los niños y los jóvenes. El trabajo en la huerta y en el campo constituirá un cambio agradable en la cansadora rutina de las lecciones abstractas, a las cuales sus mentes jóvenes no debieran jamás estar limitadas. Esta variación será especialmente valiosa para el niño nervioso que encuentra en los libros lecciones agotadoras y difíciles de recordar. Hay para él salud y dicha en el estudio de la naturaleza, y las impresiones hechas no desaparecerán de su mente, por cuanto estarán asociadas con objetos que se hallan constantemente ante sus ojos" (Testimonios para la iglesia, t. 6, págs. 182, 183 [1900]). Un pedazo de tierra y un hogar cómodo CC 25 1 "Se ha de hacer que la tierra rinda su productividad; con todo, sin la bendición de Dios no podría, de suyo, hacer nada. En el principio Dios contempló todo lo que había hecho, y dijo que era bueno en gran manera. A consecuencia del pecado, la tierra fue maldita. Pero ¿ha de multiplicarse esta maldición por el aumento del pecado? La ignorancia está haciendo su obra funesta. Siervos perezosos están acrecentando el mal a causa de sus hábitos ociosos. Muchos no están dispuestos a ganarse el pan con el sudor de su frente y se niegan a cultivar la tierra. Pero la tierra oculta bendiciones en sus profundidades para quienes tienen el valor, la voluntad y la perseverancia para recoger sus tesoros. Los padres y las madres que poseen un pedazo de tierra y un hogar cómodo son reyes y reinas. CC 25 2 "Muchos agricultores no han obtenido utilidades proporcionadas de sus tierras debido a que emprendieron ese trabajo como si fuese una ocupación degradante; no ven que hay en él una bendición para sí mismos y para sus familias. Todo lo que pueden discernir es un estigma de servidumbre. Sus huertos son descuidados, las mieses no se almacenan en el momento debido y se hace un mero trabajo superficial en el cultivo de la tierra" (La educación cristiana, págs. 348, 349 [1894]). El cultivo de frutas y verduras y la crianza de aves CC 25 3 "En esta región hay una gran porción de tierra desocupada. Algunos miembros de nuestro pueblo que viven en la atmósfera envenenada de las ciudades harían bien en conseguir unas pocas hectáreas de esta tierra. Para mantenerse podrían cultivar frutas y verduras y criar aves. El sanatorio les compraría gustosamente huevos y verduras. Me agradaría que se iniciara alguna empresa semejante. Los padres y los hijos recibirían una gran bendición si abandonaran las ciudades perversas y contaminadas y fueran al campo" (Carta 63, 1904). La vida en el campo es una bendición para los pobres CC 26 1 "Si los pobres que hoy atestan las ciudades encontrasen casas en el campo, podrían no sólo ganarse la vida, sino también recobrar la salud y gozar de la felicidad que ahora desconocen. Rudo trabajo, vida sencilla, estricta economía, y a menudo penalidades y privaciones, es lo que les tocaría. Pero ¡qué bendición sería para ellos dejar la ciudad, con sus incitaciones al mal, sus alborotos y sus crímenes, su miseria e impureza, para saborear la tranquilidad, paz y pureza del campo! CC 26 2 "Si a muchos de los que viven en las ciudades y que no tienen ni un metro cuadrado de hierba que pisar, y que año tras año no han mirado más que patios sucios y estrechos callejones, paredes de ladrillo y pavimentos, y un cielo nublado de polvo y humo, se los llevara a algún distrito rural, en medio de campos verdes, bosques, collados y arroyos, bajo un cielo claro y con aire fresco y puro de campo, casi les parecería estar en el Cielo. CC 26 3 "Apartados así del contacto de los hombres y de la dependencia de ellos, y alejados de los ejemplos, las costumbres y el bullicio corruptores del mundo, se acercarían más y más al corazón de la naturaleza. La presencia de Dios sería para ellos cada vez más real. Muchos aprenderían a depender de él. A través de la naturaleza oirían la voz de Dios hablar de paz y amor a su corazón, y su mente, alma y cuerpo responderían al poder reconstituyente y vivificador" (El ministerio de curación, págs. 143, 144 [1905]). Fundación de industrias para las familias CC 27 1 "Los creyentes que ahora viven en las ciudades tendrán que trasladarse al campo con el fin de salvar a sus hijos de la ruina. Será necesario fundar industrias que proporcionen trabajo a estas familias. Los dirigentes del colegio de-- --y de-- --deberían estudiar las posibilidades de que estas instituciones instalen dichas industrias, para que los miembros de nuestro pueblo que desean abandonar las ciudades puedan adquirir hogares modestos sin hacer grandes desembolsos, y que también puedan encontrar trabajo. Ambas instituciones ofrecen perspectivas favorables y alentadoras para el desarrollo de este plan. Se lo debe analizar. CC 27 2 "Hasta que no haya comenzado esta obra, no es posible especificar todo lo que debe hacerse. Oren por este asunto, recordando que Dios dirige el timón, y que él guía el desarrollo de las diversas empresas. Cuando en un determinado lugar se dirige apropiadamente la obra, ello es una lección objetiva para otros lugares. Al realizar la tarea no debe aplicarse un criterio estrecho ni egoísta. El trabajo debe partir de una base sencilla y sensata. Todos deben aprender que no basta con aseverar que creen en la verdad, sino que deben ejemplificarla en la vida diaria" (Carta 25, 1902). Fábricas de alimentos saludables CC 27 3 "Aquí [Avondale] debería establecerse una industria de alimentos saludables. Debería ser una industria conectada con el colegio. Dios me ha indicado que los padres pueden hallar trabajo en esta industria y enviar a sus hijos al colegio. Pero todo debe ser hecho con la mayor sencillez. No debe haber extravagancia en ningún aspecto. Es necesario realizar una obra sólida, porque de lo contrario los resultados dejarían mucho que desear" (Australasian Union Conference Record, 28 de julio de 1899). ------------------------Capitulo 5 - Preparación para la crisis que provocará la ley dominical Nos esperan tiempos difíciles CC 28 1 "No debemos ubicarnos donde seremos forzados a estar en contacto estrecho con quienes no honran a Dios... Pronto surgirá una crisis con respecto a la observancia del domingo... CC 28 2 "El partido del domingo se está fortaleciendo en sus pretensiones falsas, y esto significará opresión para quienes decidan guardar el sábado del Señor. Debemos ubicarnos en un lugar donde podamos cumplir plenamente con el mandamiento del sábado. El Señor declara: 'Seis días trabajarás, y harás toda tu obra; mas el séptimo día es reposo para Jehová tu Dios; no hagas en él obra alguna' [Exo. 20:9, 10]. Y debemos tener cuidado de no colocarnos en un lugar donde será difícil para nosotros y nuestros hijos observar el sábado. CC 28 3 "Si en la providencia de Dios podemos conseguir lugares lejos de las ciudades, el Señor quiere que lo hagamos. Nos esperan tiempos difíciles" (Mensajes selectos, t. 2, pág. 412 [1908]). Apresurarnos para estar listos CC 28 4 "Cuando el poder con el que se inviste a los reyes es aliado de lo bueno, ello se debe a que el que lleva la responsabilidad está bajo la influencia divina. Cuando el poder está aliado con la maldad, está ligado con los instrumentos satánicos, y obrará para destruir a quienes son propiedad del Señor. El mundo protestante ha establecido un día de reposo idolátrico en el lugar donde debería estar el sábado de Dios, y así están pisando en las huellas del papado. Por esta razón veo la necesidad de que las familias del pueblo de Dios se trasladen fuera de las ciudades, a lugares apartados del campo, donde puedan cultivar la tierra y cosechar los productos que ellas mismas siembren. De este modo podrán criar a sus hijos con hábitos sencillos y saludables. Veo la necesidad de apresurarnos con el fin de tener todas las cosas dispuestas para la crisis" (Ibíd. [1897]). ------------------------Capitulo 6 - Las instituciones como centros de colonización No debemos formar colonias CC 30 1 "El Señor desea que en nuestros días su pueblo se disperse portoda laTierra. No debe agruparse en colonias. Jesús dijo: 'Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura' (Mar. 16:15). Cuando los discípulos cedieron a su deseo de permanecer agrupados en Jerusalén, se permitió que fueran perseguidos, y tuvieron que dispersarse por todas las regiones del mundo habitado. CC 30 2 "Durante muchos años nuestro pueblo ha recibido mensajes de advertencia y exhortación, a través de los cuales se lo ha instado a salir al gran campo de labor del Maestro para trabajar abnegadamente en favor de las almas" (Testimonios para Ia iglesia, t. 8, pág. 228 [1904]). Trabájese en comunidades dispersas CC 30 3 "Muchos de los miembros de nuestras iglesias grandes hacen muy poco o comparativamente nada. Podrían realizar una buena obra si, en vez de hacinarse, se dispersaran por lugares donde todavía no ha penetrado la verdad. Los árboles plantados en forma demasiado apretada no prosperan. El jardinero los transplanta para que tengan lugar donde crecer, y no quedar atrofiados y enfermizos. La misma regla surtiría efecto en nuestras iglesias grandes. Muchos de los miembros están muriendo espiritualmente porque no se hace precisamente esto. Se están volviendo enfermizos y deficientes. Transplantados, tendrían lugar donde crecer fuertes y vigorosos. CC 31 1 "No es el propósito de Dios que sus hijos formen colonias o se establezcan juntos en grandes comunidades. Los discípulos de Cristo son sus representantes en la Tierra, y Dios quiere que estén dispersados por todo el país, en pueblos, ciudades y aldeas, como luces en medio de las tinieblas del mundo. Han de ser misioneros para Dios, quienes por medio de su fe y sus obras atestigüen que se acerca la venida del Salvador" (Testimonios para la iglesia, t. 8, págs. 255, 256 [1 904]). Lugares que ofrecen posibilidades de trabajo misionero CC 31 2 "Los miembros laicos de nuestras iglesias pueden realizar una obra que, hasta ahora, apenas ha sido iniciada por ellos. Nadie debe trasladarse a lugares nuevos simplemente para obtener ventajas mundanales; sino que donde hay oportunidades para ganarse la vida, deben entrar familias bien arraigadas en la verdad, una o dos familias por lugar, para trabajar como misioneros. Deben sentir amor por las almas, preocupación por trabajar en su favor, y deben estudiar la manera de llevarlas a la verdad. Pueden distribuir nuestras publicaciones, celebrar reuniones en sus casas, llegar a conocer a sus vecinos e invitarlos a venir a esas reuniones. Así harán brillar su luz por medio de las buenas obras" (Ibíd., pág. 256 [1904]). No dejarse seducir por las ventajas que ofrecen nuestras instituciones CC 31 3 "Quienes se sienten inclinados a radicarse cerca de nuestra casa editora, o del sanatorio y el colegio que poseemos en Takoma Park, deberían pedir consejo antes de trasladarse. CC 31 4 "A quienes consideran que Mountain View es un lugar conveniente para vivir, porque allí está establecida la Pacific Press, les digo: 'Miren hacia otras partes del mundo, las cuales necesitan recibir la luz que les ha sido confiada. Recuerden que Dios ha dado a cada hombre su obra. Elijan alguna localidad donde tengan oportunidad de hacer brillar vuestra luz en medio de la oscuridad moral'. CC 32 1 "Siempre ocurre que cuando se establece una institución en cierto lugar, muchas familias desean ir a vivir cerca de ella. Así sucedió en Battle Creek y en Oakland, y, hasta cierto punto, casi en todos los lugares donde tenemos colegios o sanatorios" (Fundamentals of Christian Education, págs. 494, 495 [1 904]). No establecer centros como Jerusalén CC 32 2 "Nuestro pueblo no debe... considerar que----es un centro como Jerusalén. El hecho de que cierto número de hermanos haya sido llamado a este lugar para trabajar en la obra de publicaciones, no debe inducir a los demás a pensar que es apropiado que allí se establezca un gran número de familias adventistas. Y todos los que trabajan en la oficina deben estar dispuestos a partir, si Dios los llama a algún otro lugar" (Manuscrito 148, 1905). CC 32 3 "No se agrupen en un solo lugar, incurriendo en el mismo error que en Battle Creek. Hay centenares de lugares que necesitan recibir la luz que Dios les ha dado" (Fundamentals of Christian Education, pág. 495 [1904]). Permanecer en iglesias pequeñas - Abrir nuevas escuelas CC 32 4 "Muchas familias que, con el fin de educar a sus hijos, se trasladan a lugares donde están establecidas nuestras escuelas mayores, prestarían mejor servicio al Maestro quedando donde están. Debieran animar a la iglesia de la cual son miembros a establecer una escuela primaria donde sus propios niños podrían recibir una educación cristiana completa y práctica. Sería inmensamente mejor para sus hijos, para sí mismos y para la causa de Dios que se quedasen en las iglesias menores, donde es necesaria su ayuda, en vez de ir a las iglesias mayores donde, debido a que no se los necesita, están en la constante tentación de caer en la inactividad espiritual. CC 33 1 "Dondequiera que haya algunos observadores del sábado, los padres deben unirse para proveer un lugar apropiado para una escuela diurna donde sus niños y jóvenes puedan ser instruidos. Deben emplear a un maestro cristiano que, como misionero consagrado, eduque a los niños de tal manera que los induzca a llegar a ser misioneros..." (Consejos para los maestros, padres y alumnos, págs. 165, 166 [1913]). Lo que deben sentir los ángeles CC 33 2 "Pienso en lo que deben sentir los ángeles al ver que se acerca el fin, y que quienes pretenden conocer a Dios y a Jesucristo, a quien él ha enviado, se agrupan en comunidades, asisten a las reuniones y se sienten desanimados e insatisfechos cuando no se les predica lo suficiente como para que se beneficie su alma y se fortalezca la iglesia; mientras que en realidad no están haciendo absolutamente nada" (Carta 16e, 1892). Crecer y extenderse, pero no en un solo lugar CC 33 3 "Se anima a la gente a establecerse en Battle Creek, y pagan su diezmo y prestan su influencia para edificar una moderna Jerusalén que no responde al plan de Dios. En esta obra se priva a otros lugares de los beneficios que debieran recibir. Crezcan y extiéndanse, sí, pero no en un solo lugar. Salgan y funden centros de influencia donde nada o casi nada se ha hecho. Pongan fin a esta concentración; difundan los rayos salvadores de la luz, e iluminen los rincones entenebrecidos de la Tierra" (Testimonios para los ministros, págs. 254, 255 [1895]). ------------------------Capitulo 7 - Guiados por las providencias de Dios Cuando Dios abra el camino CC 34 1 "Ha llegado el tiempo cuando, a medida que Dios abra el camino, las familias deberían salir de las ciudades. Los niños deberían ser llevados al campo. Los padres deberían conseguir un lugar tan apropiado como lo permitan sus recursos. Aunque la casa sea pequeña, debe estar rodeada por terreno que pueda ser cultivado" (Mensajes selectos, t. 2, pág. 413 [1 903]). Dios ayudará a su pueblo CC 34 2 "Los padres pueden adquirir casas pequeñas en el campo, con terreno para cultivar, donde sea posible tener huertos para sembrar verduras y plantar árboles frutales, con el fin de reemplazar la carne que tanto contamina la sangre vital que circula por las venas. En esos lugares los niños no estarán rodeados por las influencias corruptoras de la ciudad. Dios ayudará a su pueblo a encontrar tales lugares fuera de las ciudades" (El ministerio médico, pág. 412 [1902]). Hay que ayudar a abrir el camino CC 34 3 "A medida que transcurra el tiempo, cada vez será más necesario que nuestro pueblo deje las ciudades. Durante años hemos recibido la instrucción de que nuestros hermanos y hermanas, y especialmente las familias con hijos, deberían planificar salir de las ciudades a medida que puedan hacerlo. Muchos tendrán que trabajar laboriosamente para ayudar a abrir el camino. Pero hasta que sea posible salir, durante todo el tiempo que permanezcan en ellas deberían ocuparse activamente en el trabajo misionero, por muy limitada que sea su esfera de influencia" (Mensajes selectos, t. 2, pág. 413 [1906]). Consejo y advertencia a quienes se proponen salir de las ciudades CC 35 1 "Hermano mío, su carta me dice que en Battle Creek hay muchos que están decididos a salir de ese lugar. Existe una gran necesidad de que ahora se lleve a cabo tal cosa. Los que por fin han decidido salir, que no lo hagan en forma apresurada como respuesta a un movimiento de agitación, en forma imprudente, o de un modo tal que después tengan que arrepentirse profundamente de haber salido... CC 35 2 "No deben realizarse movimientos imprudentes motivados por el consejo de salir de Battle Creek. No hagan nada sin buscar la sabiduría de Dios, quien ha prometido darla liberalmente a todos los que se la pidan, sin reconvenir a nadie. Todo lo que se puede hacer es aconsejar e informar y luego dejar, a quienes están convencidos acerca de cuál es su deber, que se muevan bajo la dirección divina y de todo corazón dispuestos a aprender de Dios y a obedecerle. CC 35 3 "Me siento preocupada cuando considero que puede ser que haya incluso algunos de nuestros profesores que necesiten el equilibrio proporcionado por el sano juicio. Los mensajeros que llevan el mensaje de la misericordia a nuestro mundo, que cuentan con la confianza del pueblo, serán buscados como consejeros. Los hombres que no poseen una experiencia en la vida práctica deben actuar con mucho cuidado, porque corren el riesgo de aconsejar sin saber lo que sus consejos pueden inducir a otros a llevar a cabo. El don de aconsejar CC 36 1 "Algunos hombres comprenden claramente los problemas y tienen habilidad para aconsejar. Esto es un don de Dios. En los momentos cuando la causa de Dios necesita palabras certeras, solemnes y sólidas, pueden hablar en forma tal que las mentes perplejas y en oscuridad lleguen a captar, como un repentino rayo de luz, la conducta que deben seguir, [y esto constituirá la respuesta a las preguntas] que los han mantenido perplejos y los han desconcertado durante semanas y meses mientras estudiaban el problema. Se produce un esclarecimiento, una iluminación del camino que está delante de ellos, porque el Señor ha dejado brillar su luz, y ellos ven que sus oraciones son contestadas y que su camino se ilumina. Pero puede ser que se den consejos imprudentes, que sólo digan que deben salir de Battle Creek, a pesar de que no haya nada claramente definido con respecto a la ventaja espiritual que podrían lograr para sí mismos o para otros al hacer el cambio. Considerar cuidadosamente todo movimiento CC 36 2 "Que todos tomen el tiempo necesario para realizar cuidadosas consideraciones, para que no sean como el hombre de la parábola que comenzó a edificar y luego fue incapaz de terminar. No debe realizarse ningún movimiento sin considerar cuidadosamente ese movimiento y sus resultados; todo debe ser tenido en cuenta... A cada hombre se le dio su obra de acuerdo con sus diversas habilidades. Por tanto no debe actuar con vacilación sino con firmeza, y sin embargo confiando humildemente en Dios. CC 36 3 "Puede haber personas que se apresuran a hacer una cosa, y que se comprometen en negocios acerca de los cuales no saben nada. Dios no requiere que se haga esto. Piensen con sinceridad y oración, y estudien la Biblia cuidadosamente y con oración, teniendo la mente y el corazón despiertos para oír la voz de Dios... Comprender la voluntad de Dios constituye una gran cosa. Se necesitan planes bien definidos CC 37 1 "Me dirijo a la iglesia de Battle Creek para que actúe de acuerdo con los consejos dados por Dios. Es necesario que muchos salgan de Battle Creek, y sin embargo también es necesario que tengan planes definidos acerca de lo que harán cuando salgan de Battle Creek. No salgan apresuradamente sin saber lo que están haciendo... Ojalá que haya hombres comunes, sabios y considerados, bien equilibrados, que sean consejeros seguros, que comprendan la naturaleza humana, y que sepan cómo dirigir y aconsejar en el temor de Dios. Los peligros de la nueva experiencia CC 37 2 "He visto que hay peligros que amenazan toda nueva experiencia de la iglesia, porque algunos oyen las cosas con un espíritu muy obcecado. Mientras algunos profesores pueden ser enérgicos y eficientes en la enseñanza de acuerdo con las doctrinas bíblicas, puede ser que no todos sean hombres dotados de un conocimiento de la vida práctica, debido a lo cual no podrán aconsejar con seguridad y sin peligro a las mentes perplejas. No disciernen la situación difícil que necesariamente aquejará a cada familia que ha de realizar un cambio. Por tanto, todos sean muy cuidadosos en lo que dicen; si no conocen el parecer de Dios en algunos asuntos, nunca hablen acerca de lo que suponen o adivinan. Si no saben nada definido, díganlo así, y dejen que la persona confíe plenamente en Dios. Órese mucho, y aun con ayuno, para que nadie actúe en oscuridad, sino que avance en la luz así como Dios está en luz... Hágase todo con orden CC 38 1 "No se haga nada en forma desordenada para que no se produzcan grandes pérdidas ni se sacrifiquen las propiedades a causa de discursos ardientes e impulsivos, los cuales despiertan un entusiasmo que no está de acuerdo con la voluntad de Dios, para que una victoria que es esencial que se obtenga no se convierta en derrota por falta de moderación adecuada, proyectos adecuados, principios sólidos y propósitos definidos. En este asunto debe haber una dirección sabia, y todos deben actuar bajo la dirección de un Consejero sabio e invisible, el cual es Dios. Instrumentos que son humanos lucharán por el dominio, y se efectuará una obra que no llevará la rúbrica de Dios. Ahora quiero rogar que cada persona no se vuelva con demasiada intensidad y confianza hacia los consejeros humanos, sino que busquen más fervientemente a Dios, el Ser que es sabio en consejos. Sometan todos sus caminos y su voluntad a los caminos de Dios y a la voluntad de Dios... Los resultados de un movimiento apresurado CC 38 2 "Si algunos actúan apresuradamente y salen de Battle Creek, y luego se desaniman, no se culparán a sí mismos por haber actuado imprudentemente, sino que culparán a otros diciendo que los obligaron a obrar en esa forma. Todo su desconcierto y su derrota serán atribuidos a aquellos que no deberían ser acusados... CC 38 3 "Ahora, justamente ahora, es el tiempo cuando los peligros de los últimos días se amontonan junto a nosotros, y por eso necesitamos hombres sabios como consejeros, y no hombres que pie CC 38 4 nsan que su deber consiste en crear agitación y desorden sin ser capaces de dar consejos oportunos ni organizar y disponer para que, después de cada brote de entusiasmo, de la confusión surja el orden, y haya descanso y paz por la obediencia a la Palabra de Dios. Que cada hombre ocupe el lugar que le corresponde para que realice algún trabajo para el Maestro, de acuerdo con sus diversas habilidades... CC 39 1 "¿Cómo se realizará esto? Jesús, quien los ha comprado con su sangre preciosa, y cuyos siervos y propiedad son ustedes, ha dicho: 'Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas; porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga' (Mat. 11:29, 30). Si todos acuden a jesús con un espíritu dispuesto a ser enseñado, con corazón contrito, entonces su mente estará en condiciones de ser instruida y aprender dejesús y de obedecer sus órdenes... Exponer todos los planes delante de Dios CC 39 2 "No podemos tener una fe débil ahora; no podemos estar seguros con una actitud descuidada, indolente y perezosa. Hay que utilizar hasta el último ápice de habilidad, y hay que pensar en forma aguda, serena y profunda. La sabiduría de ningún instrumento humano es suficiente para trazar planes y proyectos en este tiempo. Expongan cada plan delante de Dios con ayuno, humillando el alma delante del Señor jesús, y encomienden sus caminos al Señor. La promesa segura es que él dirigirá vuestras sendas. El posee recursos infinitos. El Santo de Israel, quien llama por su nombre a las huestes del cielo y mantiene las estrellas en su lugar, los cuida individualmente... CC 39 3 "Quisiera que todos pudiesen comprender las posibilidades y las probabilidades que están al alcance de quienes hacen de Cristo su eficacia y confianza. La vida que se oculta con Cristo en Dios siempre tiene un refugio; puede decir: Todo lo puedo en Cristo que me fortalece' (Fil. 4: 1 3). CC 39 4 "Dejo este asunto con ustedes, porque he estado preocupada y afligida a causa de los peligros que amenazan a todos en Battle Creek, no sea que actúen imprudentemente y proporcionen ventajas al enemigo. Esto no necesita ocurrir, porque si andamos humildemente con Dios, estaremos seguros" (Mensajes selectos, t. 2, págs. 414418 [1893]). ------------------------Capitulo 8 - Nuestras instituciones deben estar lejos de las zonas muy pobladas Lugares apropiados para nuestras instituciones CC 40 1 "Todavía se da esta instrucción: 'Salgan de las ciudades. Establezcan sus sanatorios, escuelas y oficinas lejos de los centros de población'. Ahora hay muchos que prefieren quedarse en las ciudades, pero dentro de poco llegará el tiempo cuando todos los que deseen evitar ver y oír el mal se trasladarán al campo; porque la maldad y la corrupción aumentarán a tal grado que la atmósfera misma de las ciudades parecerá estar contaminada" (Mensajes selectos, t. 2, pág. 409 [1907]). Cómo evitar la tentación y la corrupción CC 40 2 "Algunas personas se han preguntado por qué deberíamos trasladar nuestra casa editora de Oakland a Mountain View. Dios ha exhortado a su pueblo a dejar las ciudades. Los jóvenes relacionados con nuestras instituciones no deben estar expuestos a las tentaciones y la corrupción que existe en las grandes ciudades. Mountain View parece ser un lugar apropiado para establecer la casa editora" (Manuscrito 148, 1905). Nos esperan tiempos difíciles CC 40 3 "Este desastre [el incendio del edificio de la Review and Herald] puede producir un cambio definido en este asunto. Espero que nuestros hermanos presten atención a la lección que Dios está tratando de enseñarles, y que no vuelvan a edificar la casa editora en Battle Creek. Dios no quiere que nos establezcamos en las ciudades, porque nos esperan tiempos muy tormentosos" (Carta 2, 1903). Dónde se puede enseñar a los jóvenes con mayor eficacia CC 41 1 "Dios ha advertido una vez tras otra que nuestras escuelas, casas editoras y sanatorios deben establecerse fuera de la ciudad, en lugares donde pueda enseñarse a los jóvenes con la mayor eficacia posible qué es la verdad. Que nadie procure utilizar los Testimonios para respaldar el establecimiento de grandes intereses comerciales en las ciudades. No invaliden la luz que ha sido dada acerca de este asunto. CC 41 2 "Se presentarán hombres que hablarán cosas perversas para contrarrestar las acciones que el Señor está induciendo a sus siervos a realizar. Pero ya es tiempo de que los hombres y las mujeres razonen de causa a efecto. Es demasiado tarde, sí, demasiado tarde para establecer grandes firmas comerciales en las ciudades; es demasiado tarde para llamar a hombres y a mujeres jóvenes del campo para que vayan a las ciudades. En las ciudades están surgiendo condiciones que harán muy difícil que quienes pertenecen a nuestra fe permanezcan en ellas. Por tanto, sería un gran error invertir dinero en establecimientos comerciales en las ciudades" (Mensajes selectos, t. 2, págs. 409, 410 [1905]). Hay que trabajar en las ciudades desde puestos de avanzada CC 41 3 "Hasta donde sea posible, nuestras instituciones deberían estar situadas lejos de las ciudades. Debemos tener obreros para esas instituciones, y si éstas están ubicadas en las ciudades, eso significa que las familias de nuestro pueblo deben establecerse acerca de ellas. Pero no es la voluntad de Dios que las familias de su pueblo se establezcan en las ciudades, donde hay disturbios y confusión constantes. Hay que evitar esto para sus hijos, porque todo el sistema está corrompido por el apresuramiento, la prisa y el ruido. El Señor quiere que las familias de su pueblo se trasladen al campo, donde puedan poner su casa en la tierra y cultivar sus propios frutales y verduras, y donde sus hijos puedan estar en contacto directo con las obras de Dios manifestadas en la naturaleza. Mi mensaje es: 'Lleven a sus familias lejos de las ciudades'. CC 42 1 "Hay que hablar la verdad, ya sea que los hombres la escuchen o no. Las ciudades están llenas de tentaciones. Deberíamos planificar nuestra obra de tal manera que podamos mantener a nuestros jóvenes tan lejos como sea posible de esa contaminación. CC 42 2 "Hay que trabajar en favor de las ciudades desde puestos de avanzada externos. El mensajero de Dios dijo: '¿No serán amonestadas las ciudades? Sí; pero no por el pueblo de Dios que viva en ellas, sino mediante sus visitas realizadas para advertirlas de lo que acontecerá sobre la Tierra' " (Ibíd., págs. 410, 411 [1902]). Lugares de fácil acceso a las ciudades CC 42 3 "Que se elijan hombres de juicio, no para publicar sus intenciones, sino para buscar tales propiedades en los distritos rurales, con acceso fácil a las ciudades, aptas para el establecimiento de pequeñas escuelas de formación profesional de obreros, y donde también haya instalaciones para tratar a enfermos y almas enfermas y cansadas que no conocen la verdad. Busquen tales lugares justo fuera de las ciudades, donde también puedan adquirirse edificios apropiados, como donaciones de sus propietarios, o comprados a un precio razonable con las ofrendas de nuestro pueblo. No erijan edificios en las ciudades ruidosas" (El ministerio médico, pág. 410 [1909]). Lecciones que nos enseñan Enoc y Lot CC 43 1 "Como pueblo que guarda los mandamientos de Dios, debemos salir de las ciudades. Tal como lo hizo Enoc, debemos trabajar en las ciudades pero no vivir en ellas" (El evangelismo, pág. 61 [1899]). CC 43 2 "Cuando la iniquidad abunda en una nación, siempre ha de escucharse una voz que dé la amonestación y la instrucción, así como la voz de Lot fuera oída en Sodoma. Sin embargo, Lot podría haber preservado a su familia de muchos males si no hubiese construido su hogar en esa ciudad malvada y corrompida. Todo lo que Lot y su familia hicieron en Sodoma podría haber sido hecho por ella aun si hubiesen vivido en un lugar a cierta distancia de la ciudad. Enoc caminó con Dios, y sin embargo no vivió en medio de alguna ciudad mancillada, con toda clase de violencia y maldad, como lo hizo Lot en Sodoma" (El evangelismo, págs. 61, 62 [1903]). Iglesias, pero no instituciones en las ciudades CC 43 3 "El Señor nos ha indicado repetidamente que debemos trabajar en las ciudades desde puestos de avanzada ubicados fuera de ellas. En esas ciudades debemos tener casas de culto, como monumentos de Dios, pero las instituciones destinadas a la publicación de nuestra literatura, a la curación de los enfermos y a la preparación de los obreros deben establecerse fuera de las ciudades. Es especialmente importante que nuestra juventud sea protegida de las tentaciones de la vida en la ciudad. CC 43 4 "Es en armonía con estas instrucciones que se han comprado y se han vuelto a dedicar salones de reuniones en Wáshington y en Nashville, mientras que las casas editoras y los sanatorios se han establecido fuera de los centros congestionados de las ciudades, como puestos de avanzada. Este es el plan que se ha seguido al trasladar al campo otras casas editoras y sanatorios, y este mismo procedimiento se está siguiendo en Inglaterra en lo que concierne a la casa editora de Londres y también al colegio que hay allí. Ahora se nos proporciona la oportunidad de aprovechar las providencias de Dios al ayudar a nuestros hermanos, en éstos y en muchos otros centros importantes, a establecer la obra sobre una base firme, con el fin de que avance sólidamente. CC 44 1 "Debemos ser prudentes como serpientes y sencillos como palomas en nuestros esfuerzos por adquirir propiedades a bajo precio en el campo, y desde esos puestos de avanzada debemos trabajar las ciudades" (Mensajes selectos, t. 2, pág. 411 [1902]). El mensaje del Señor CC 44 2 "Este es el mensaje que Dios me ha estado dando: '¡Fuera de las ciudades, fuera de las ciudades!' Vendrán terremotos; vendrán inundaciones; y no hemos de establecernos en las ciudades malvadas, donde el enemigo es servido a todo paso y donde Dios es a menudo olvidado. El Señor desea que tengamos una clara visión espiritual. Debemos ser rápidos para discernir el peligro que habrá en establecer instituciones en estas ciudades malvadas. Debemos hacer planes sabios para amonestar a las ciudades, y al mismo tiempo vivir donde podamos proteger a nuestros hijos y protegernos a nosotros mismos de las influencias contaminantes y desmoralizadoras tan prevalecientes en esos lugares" (Notas biográficas de Elena C. de White, pág. 449 [1906]). ------------------------Capitulo 9 - Huida apresurada en el conflicto final La señal para la huida CC 45 1 "No es ahora tiempo para que el pueblo de Dios fije sus afectos o se haga tesoros en el mundo. No está lejano el tiempo en que, como los primeros discípulos, seremos obligados a buscar refugio en lugares desolados y solitarios. Asi como el sitio dejerusalén por los ejércitos romanos fue la señal para que huyesen los cristianos de Judea, así la toma de poder por parte de nuestra nación [Estados Unidos], en el decreto que imponga el día de descanso papal, será para nosotros una advertencia. Entonces será tiempo de abandonar las grandes ciudades, y prepararnos para abandonar las menores en busca de hogares retraídos en lugares apartados entre las montañas. CC 45 2 "Y ahora, en vez de buscar costosas moradas aquí, debemos prepararnos para trasladarnos a una patria mejor, la celestial. En vez de gastar nuestros recursos en la complacencia propia, debemos buscar la economía" (Testimonios para la iglesia, t. 5, págs. 439,440 [1885]).