Capítulo
2. Discurso para un congreso campestre
6. Los Testimonios menospreciados
7. Los obreros de nuestro colegio
8. Se condenan las críticas y los celos
11. Amonestaciones y reprensiones
16. Nuestras reuniones Campestres
18. La diligencia en los negocios
19. El traslado a Battle Creek
20. La mundanalidad de la Iglesia
21. La consulta a los médicos espiritistas
22. Miremos a Jesús
23. Se piden obreros
24. El sello de Dios
25. Una exhortación
27. La obra del ministro del Evangelio
29. La fidelidad en la obra de Dios
30. La influencia de la incredulidad
32. La crítica contra los ministros
33. Es necesario ser fieles y perseverar
35. Alabad a Dios
36. La responsabilidad de los padres
38. La paciencia del Cristiano
40. El amor entre los hermanos
42. La elaboración de vino y cidra
43. El casamiento con los incrédulos
44. El sostén de las misiones urbanas
45. El verdadero espíritu misionero
46. Hombres jóvenes como misioneros
47. La importancia de la obra del colportaje
49. Los negocios y la religión
50. El espíritu del mundo es una trampa
53. La Iglesia es la luz del mundo
54. Josué y el Ángel
55. La unidad y el amor en la Iglesia
56. La conducta en la casa de Dios
57. La religión y la educación científica
58. La educación de nuestros hijos
59. Peligros que encaran los jóvenes
60. Lectura apropiada para los niños
62. La mundanalidad
66. Necesidades de nuestras instituciones
67. Nuestras instituciones de Battle creek
69. La influencia cristiana en el hogar y en la Iglesia
71. El estudio diario de la Biblia es necesario
72. La educación de los obreros
75. El amor por los que yerran
77. Una carta
78. El amor de Dios por los pecadores
80. Ideas erróneas acerca de la confesión
81. La presencia de Dios es real
82. Naturaleza e influencia de los Testimonios
86. El Centinela Americano y su misión
89. El carácter de Dios revelado en Cristo